Comenzamos un tiempo de gracia y bendición, iniciando los preparativos de nuestro XII Capítulo General.

¿Qué es eso de un Capítulo General?

Un Capítulo General es la autoridad máxima en un Instituto.

El nº 200 de las Constituciones dice que le corresponde defender el patrimonio espiritual del Instituto, promover la vitalidad espiritual y apostólica del mismo, y fomentar la renovación y constante adaptación de la vida religiosa.

Las Discípulas de Jesús elegidas capitulares de Venezuela, México y España hemos tenido el primer encuentro pre-capitular, los días 31 de octubre y 1 de noviembre para compartir el inicio de este camino.

Para todas las hermanas y para la Familia Discípulas de Jesús es un tiempo de encuentro y de Gracia.

Caminando unidas como Discípulas junto al Maestro de la mano de su Madre, la Virgen María, y dejándonos llevar por el Espíritu Santo, en un proceso de discernimiento, seguimos profundizando en nuestro carisma. Iremos buscando los caminos que Él quiere para las Discípulas de Jesús.


Acogemos los deseos de nuestro Fundador que nos anima a tener “Los ojos siempre en Jesús”. Queremos:

- Hacer el camino juntas, unidas a Jesús muerto y resucitado: acompañadas por Él, miradas por Él, sorprendidas por Él.
- Volver a enamorarnos y dejar que arda nuestro corazón al encontrarnos con Él en todos los hermanos – en los más necesitados y los que están a nuestro lado-.

Por eso nuestro lema es:

CAMINAMOS CONTIGO, TESTIGOS DE TU AMOR



… y nada mejor que mirarlo y mirarnos a través del icono de los discípulos de Emaús (Lc 24, 13-35).


Nuestra respuesta es de gratitud a Dios y a las Hermanas por la confianza que han puesto en nosotras.

Disponemos nuestro corazón para sacar lo mejor de nosotras mismas y prestar este servicio que se nos encomienda desde la generosidad y disponibilidad… con entusiasmo y esperanza, para lo que se requiera de nosotras:

¡Hágase! ¡que no se haga mi voluntad, sino la tuya, Señor!


Nos acompañó en el encuentro D. Florencio Abajo, director General de la Hermandad de Sacerdotes Operarios, al que agradecemos compartiera estos momentos. Con la reflexión sobre “la sinodalidad y el discernimiento común”, nos ayudó a emprender este camino sinodal y a situarnos en el ritmo y sentir de la Iglesia, con el deseo de crear un estilo de trabajo y un clima espiritual que posibilite el discernimiento personal y comunitario.

Establecimos el itinerario a seguir para la reflexión de los temas que iremos compartiendo hasta el desarrollo del Capítulo General. Seguimos orando e invocamos al Espíritu para que nos asista en este camino de discernimiento y preparación del Capítulo General. Invitamos a rezar la oración por el Capítulo General, a las Hermanas en todas las comunidades y a la Familia Discípulas de Jesús, hasta la celebración del mismo.

“En la unión de todas está la fuerza del Instituto” (cf. Beato Pedro)



¡El Maestro nos llama!

Y en este momento de nuestra historia, necesita nuestro sí para que su Evangelio se siga extendiendo.
Contamos con la intercesión del Beato Pedro y la de nuestros Mártires; la de San José y la de la Virgen María.

¡Confiamos en la acción del Espíritu sobre cada una de nosotras y en el Capítulo!